Blue Valentine, ópera prima de Derek Cianfrance, protagonizada soberbiamente por los actores Ryan Gosling y Michelle Williams, nos narra la historia de una pareja que ha pasado de amor al desamor, en una doble narrativa que mezcla presente y pasado recalcando lo que fueron y lo que son.
El filme cuenta la historia de amor entre Dean y Cindy , la vemos en partes desde que se conocieron, se enamoraron, se casaron, hasta el momento presente en el cual tiene una casa, una hija y un perro así como un montón de frustraciones personales y una relación en decadencia . Parecería una historia mil veces contada, pero justamente es la manera en que está planteada donde radica su maestría.
El filme cuenta la historia de amor entre Dean y Cindy , la vemos en partes desde que se conocieron, se enamoraron, se casaron, hasta el momento presente en el cual tiene una casa, una hija y un perro así como un montón de frustraciones personales y una relación en decadencia . Parecería una historia mil veces contada, pero justamente es la manera en que está planteada donde radica su maestría.
El film prácticamente esta sustentado en dos personajes a lo largo de todo el metraje y aún así resulta poderoso. Bastante de esto sucde por las excelentes actuaciones de sus protagonistas: una Michelle Williams fenomenal que pocos la recuerdan como la chica alocada de la serie de televisión Dawson's Creek. La evolución de esta actriz ha sido sorprendente y de hecho estuvo nominada a casi todos los premios norteamericanos del 2011 como mejor actriz. Por otro lado tenemos al siempre potente Ryan Gosling, cuya filmografía es muy interesante ( recordemos su maestría en Half Nelson) y que brinda un performance desgarrador. Tristemente la crítica ignoró al actor, y fue el que quedo afuera injustamente de las nominaciones del año. Increíble pensar que la prensa extranjera que vota en los Globos de Oro haya nominado a un gris Mark Wahlberg ( lo más flojo de la cinta The Fighter) ignorando a Gosling. Sin embargo vale con ver esta cinta para encontrarnos con un actor maravilloso que a mi criterio es el más sobresaliente de la pareja.
El film tiene momentos dulces y otros muy amargos. Con ellos vivimos su historia y cuando se enamoran nos cautiva la alegría de Cindy, el ansia de compromiso de Dean , la ilusión, las ganas de pertenecerse. Sin embargo a los poco minutos estamos inmersos en el infierno , de palabras crueles, reclamos, peleas. Resalta la manera realista en que se plantea el drama “muestra a una pareja con honestidad, verdadera emoción y sin apariencia de manipulación”. Tampoco el director es excesivamente extremista, no hay momentos de felicidad empalagosa ni exceso de dramatismo, aunque sin duda la película puede resultar cruda y álgida en determinados momentos, ya que solo dos personas que han convivido durante años tienen la capacidad de saber como herir al otro.
Con una buena factura, hermosa fotografía y dedicada ejecución, esta cinta independiente, es un film conmovedor y real, cuyo final no deja moraleja, como si el director hubiese abierto un canal para la reflexión acerca de las complejidades de la vida en pareja, que deja al espectador emocionado y pensativo.
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